Me empeño en hacer mermeladas sin azúcar en casa y no se para que, después no las como, no soy una persona a la que le guste excesivamente el dulce, y sobretodo a la hora del desayuno, salvo algún día contado, yo desayuno salado.
Pero esta receta es diferente, lleva lo justo de dulce, y el toque ácido del limón me vuelve loca.
El Lemon Curd es una crema de limón de origen ingles, muy utilizada en repostería. Puedes utilizarla de relleno para pasteles y tartas, untarla sobre tostadas (¡con queso fresco esta increíble!), o añadirla a nuestra lista de coberturas caseras.
La versión de hoy es muy ligera, y poco tiene que ver con la versión original, pero “da el pego” y esta riquísima, con estas cantidades me salieron dos botes pequeños, que aguantan bien cerrados bastante tiempo en la nevera, aunque…¡dudo que lleguen a durar mucho!
Os advierto que esta no sera la ultima receta que os pondré de esta crema, porque tengo en mente algún cambio que probar.
Y sin más espera…
¡A cocinar!
Ingredientes
- 200 ml de zumo de limón (en mi caso, 3 limones hermosos)
- Ralladura de 1 limón
- 3 ctas de miel (3 sf/ 3 sp/ 1 pp) o edulcorante al gusto
- 2 huevos (0 sf/ 4 sp/ 4 pp)
- 15 gr de maicena (2 sf/ 2sp/ 1pp)
Elaboración
Rallamos el limón, con cuidado de no añadir la parte blanca, que amarga; y los exprimimos.
Ponemos a calentar en un cazo a fuego medio, el zumo, la ralladura y la miel.
Batimos bien los huevos, con la maicena, procurando que no queden grumos.
Incorporamos, y subimos el fuego, removiendo sin parar hasta que tengamos la textura deseada.
Lo ponemos en botecitos, dejamos enfriar y conservamos en la nevera.
La cantidad de miel o edulcorante, debemos ir probando hasta dar con lo que más nos guste, quien sea muy dulzón que añada más, a mi me gusta que sepa bien a limón.
Sencillo, ¿verdad? ¡Pues no dejéis de probarlo!
😉 Angela